La historia detrás del escándalo: un ‘rug pull’ de manual
El mundo de las criptomonedas nunca deja de sorprendernos. Entre las promesas de riqueza instantánea y la volatilidad extrema, a veces surgen historias que parecen sacadas de una película. Este es el caso de un niño de tan solo 13 años (algunas fuentes afirman que 10) que desató el caos en la comunidad cripto al realizar un rug pull con dos tokens creados por él, embolsándose 46.000 euros y dejando a los inversores con activos sin valor.
Podcast:
¿Qué es un ‘rug pull’?
Antes de entrar en detalles, es importante entender este término tan conocido en el mundo cripto. Un ‘rug pull’ (o «tirón de alfombra») es una estrategia fraudulenta donde los creadores de una criptomoneda inflan artificialmente su valor para luego desaparecer con los fondos de los inversores. Es una táctica común en las finanzas descentralizadas (DeFi) y en tokens meme que prometen grandes ganancias en poco tiempo, pero que en realidad son trampas bien diseñadas.
¿Cómo lo hizo?
El joven lanzó un token llamado Gen Z Quant en la plataforma Pump.fun, conocida por su enfoque en criptomonedas meme, populares entre inversores por su alta volatilidad y su atractivo humorístico. En menos de una hora, el valor del token se disparó un 260%, atrayendo a decenas de inversores ansiosos por subirse al tren de las ganancias rápidas.
Sin embargo, este niño no se quedó de brazos cruzados. Una vez que el token alcanzó su punto más alto, vendió todas sus participaciones, embolsándose unos 30.000 dólares en su primer intento. Por si esto fuera poco, repitió la misma jugada con otro token, logrando recaudar otros 12.000 dólares adicionales.
La burla tras la estafa
En lugar de desaparecer silenciosamente tras el fraude, el joven se mofó abiertamente de los inversores afectados en redes sociales, publicando gestos ofensivos y mensajes provocadores. Esto encendió los ánimos de la comunidad cripto, que no tardó en organizarse para localizar al niño y a su familia.
A través del conocido fenómeno del «doxxing» (investigar y divulgar información personal), los miembros de la comunidad lograron encontrar y compartir datos como las direcciones, redes sociales, y hasta la escuela del joven. Incluso, en una muestra de ingenio cripto, crearon tokens llamados QUANT DAD, QUANT MOM y CABAL, este último basado en la imagen de su perro.
El giro inesperado
Lo que parecía una historia de desastre para los inversores terminó dando un giro inesperado. Inversores más experimentados retomaron el token Gen Z Quant y lograron inflar su capitalización de mercado hasta unos 70 millones de dólares.
Esto llevó a un afortunado inversor a transformar una pequeña inversión inicial de dos Solanas (unos 462 dólares) en un beneficio de 988.000 dólares. Sin embargo, como es típico en este mercado tan volátil, el valor del token volvió a desplomarse poco después, quedando en una fracción de su máximo histórico.
Irónicamente, el joven creador podría haber obtenido más de 1,2 millones de dólares si hubiera retenido sus participaciones en lugar de venderlas tan pronto.
Consejos para evitar un ‘rug pull’
Este caso nos deja una valiosa lección sobre los riesgos inherentes al mundo de las criptomonedas. Aunque es un mercado lleno de oportunidades, también está plagado de fraudes. Aquí te dejamos algunos consejos básicos para protegerte:
- Investiga el proyecto: Asegúrate de conocer quién está detrás del token y su trayectoria. Los proyectos con equipos anónimos suelen ser más riesgosos.
- Revisa la liquidez: Un proyecto legítimo bloquea la liquidez en contratos inteligentes, lo que impide retiradas fáciles por parte de los creadores.
- Cuidado con el hype: No te dejes llevar por promesas de ganancias rápidas. Busca proyectos con utilidad y fundamentos sólidos.
- Auditorías de código: Verifica si el contrato inteligente ha sido auditado por empresas reconocidas. Esto puede prevenir vulnerabilidades y malas intenciones.
Este episodio no solo expone los riesgos de invertir en criptomonedas meme y proyectos no verificados, sino que también ilustra la importancia de estar informado y tomar decisiones cautelosas.
La comunidad cripto es un lugar donde las reglas convencionales no siempre aplican, y donde el ingenio y la precaución pueden marcar la diferencia entre una inversión exitosa y un desastre financiero.
Mantente alerta, sigue aprendiendo, y recuerda: en este mundo, lo barato puede salir muy caro.
