Según un informe de eMarketer analizado por el Wall Street Journal, Google, que ha sido sinónimo de búsquedas en internet durante más de quince años, verá su cuota publicitaria caer por debajo del 50% en 2025. Este hito marca el final de un dominio absoluto y da paso a un mercado en el que la competencia y los hábitos de consumo digital están cambiando las reglas del juego.
El declive de Google no solo redefine el panorama del mercado publicitario, sino que pone en tela de juicio su capacidad de adaptación en un ecosistema digital donde las búsquedas tradicionales están perdiendo relevancia.
Podcast:
Tres fuerzas que amenazan el monopolio publicitario de Google
La caída de Google se debe a una combinación de factores que están reconfigurando la forma en que los usuarios interactúan con las búsquedas y los anuncios digitales:
- Proliferación de contenido generado por IA:
El aumento de textos, videos y gráficos creados por inteligencia artificial afecta la calidad y relevancia de los resultados que ofrece Google. - Migración a plataformas especializadas:
- Amazon se ha convertido en el rey de las búsquedas de productos y compras.
- TikTok, con su enfoque audiovisual, es la plataforma favorita para descubrir tendencias, con más de 3.000 millones de búsquedas diarias.
- IA y chatbots cambiando los hábitos de búsqueda:
Herramientas como ChatGPT y Perplexity AI están transformando la forma de encontrar información, proporcionando respuestas directas y personalizadas en lugar de enlaces tradicionales.
La paradoja de Google: Adaptarse o desaparecer
El desafío más grande para Google no es la competencia directa, sino el cambio radical en cómo las personas buscan información. Las nuevas generaciones prefieren formatos audiovisuales, respuestas inmediatas y plataformas más inmersivas. En contraste, Google sigue siendo sinónimo de los «diez enlaces azules».
Gemini y la transición hacia respuestas basadas en IA
Google ha comenzado su transición hacia respuestas generadas por inteligencia artificial con proyectos como Gemini, que busca competir con modelos como ChatGPT. Sin embargo, este cambio no es gratuito:
- Migrar a un modelo basado en IA reduce los clics en anuncios.
- Menos clics significan menos ingresos publicitarios.
- Esto pone en peligro el ecosistema web del que Google depende.
La competencia ya nació adaptada
Mientras Google lucha por cambiar su modelo, sus rivales ya están operando bajo el nuevo paradigma:
- TikTok: Con contenido visual y experiencial, domina la búsqueda de tendencias y entretenimiento.
- Amazon: Se consolida como el buscador número uno para compras y productos.
- ChatGPT y Perplexity: Ofrecen respuestas inmediatas, personalizadas y contextuales, capturando usuarios que buscan información rápida y confiable.
En cifras: El cambio de poder en el mercado publicitario
- 175.000 millones de dólares: Lo que Google ingresó en publicidad de búsquedas en 2023, representando el 57% de los ingresos de Alphabet.
- 7,6%: La tasa de crecimiento de Google en este mercado, una cifra que se ralentiza frente al 17,6% de Amazon.
- 3.000 millones de búsquedas diarias: Las que realiza TikTok, consolidándose como una de las mayores amenazas al modelo de búsquedas de Google.
Estas cifras no solo muestran el crecimiento de los rivales, sino también cómo los hábitos de consumo digital están evolucionando rápidamente.
El cambio en los hábitos de búsqueda y el riesgo para Google
Más allá de la publicidad, la caída de Google refleja un cambio fundamental en cómo los usuarios interactúan con la web:
- Generación Z y Millennials buscan experiencias más dinámicas y visuales.
- Herramientas basadas en IA, como asistentes virtuales y chatbots, facilitan respuestas personalizadas que eliminan la necesidad de explorar múltiples enlaces.
Sin embargo, Google enfrenta una paradoja compleja:
- Si acelera hacia la IA generativa, pierde clics y, por ende, ingresos publicitarios.
- Si se queda en su modelo tradicional, pierde relevancia frente a rivales que ofrecen experiencias más atractivas.
¿Qué significa este declive para el modelo de negocio de Google?
El modelo de negocio de Google depende en gran medida de la publicidad digital, no solo para rentabilizar su motor de búsqueda, sino también para financiar sus otros proyectos tecnológicos. Si los ingresos publicitarios se reducen, el gigante tecnológico podría enfrentar dificultades para sostener su ecosistema y mantener su competitividad frente a empresas más ágiles y especializadas.
¿Qué podemos esperar del futuro de Google?
A medida que se acerca el 2025, Google tendrá que tomar decisiones clave para sobrevivir en un mercado en constante evolución. Adaptarse a un modelo más inmersivo y basado en IA será crucial, pero no sin riesgos. La pregunta es: ¿Podrá Google redefinir su papel en la era de TikTok, Amazon y la inteligencia artificial? Solo el tiempo dirá.
El descenso de Google en la cuota publicitaria marca el fin de una era, pero también el inicio de una competencia más dinámica en el mercado digital. Los cambios en los hábitos de búsqueda y la llegada de tecnologías disruptivas como la IA han transformado el panorama. Sin duda, Google tiene los recursos para adaptarse, pero el desafío será monumental. ¿Será el 2025 el año en que Google se reinvente o comience su declive definitivo?